Los animales que con más frecuencia representan un peligro para la población son el alacrán, que hasta el momento ha afectado a 92 personas, seguido de la serpiente (víbora de cascabel) con 10 casos, mientras que la araña violinista y la viuda negra han atacado a una persona cada una.
Aún y cuando no se han registrado decesos por picaduras de animales ponzoñosos en lo que va del año, existe una vigilancia permanente de las unidades médicas de la entidad para abastecerlas con antídoto suficiente con el fin de que sea aplicado en caso de ser necesario.
Los ataques de alacrán se presentan con mayor frecuencia en las zonas de las barrancas, mientras que las picaduras por víbora tienen una mayor incidencia en las partes desérticas y semi desérticas del estado, las mordeduras por viuda negra son generalizadas en todo el territorio estatal.
Es importante recalcar que las picaduras de animales ponzoñosos se incrementan considerablemente durante en la época de lluvias, cuando salen de su madriguera para reproducirse, sin embargo aun y cuando no exista precipitaciones se debe de mantener la guardia.
En caso de existir algún ataque de cualquiera de estos animales se debe de limpiar la zona afectada sólo con agua y jabón, mantener a la persona en reposo y liberarla de elementos que generen presión, como pulseras, anillos, reloj o corbata, para que en caso de que haya respuesta inflamatoria intensa no se obstruya la circulación y trasladarlo de inmediato a su centro de salud.
A continuación se presentan algunas recomendaciones para evitar la agresión de animales ponzoñosos:
Evitar todo tipo de contacto con estos animales
No agredirlos ni tratar de jugar con ellos
Vigilar los lugares poco iluminados o rincones dentro y fuera de la casa
Mantener limpio y ordenado el patio
En caso de usar insecticida, tener cuidado de no dañar a la familia o a usted mismo
En caso de salir a acampar, revisar de manera cuidadosa el lugar
En caso de ser agredido, no debe automedicarse y acudir de inmediato al médico