La mujer en el hogar:
En mi casa, la puerta del refrigerador es el lugar donde aparecen notas, recortes de periódicos y advertencias manuscritas que se colocan allí para respaldar criterios y protestas verbales, hechas o por hacer, por mi “media naranja”. Hace unas horas, leí lo siguiente: “El ama de casa en Norteamérica tiene que afrontar diariamente tantos retos que su función es igual a la del gerente general de una planta manufacturera”… La intuición, más que ésta, la experiencia, me indicaba que el próximo debate sería sobre la importancia de la mujer en el hogar, las ciencias, las artes, el progreso, los viajes espaciales, la invención de la sopa de ajo… en todo.
La desigualdad en América latina exhibe una desigualdad en la distribución del ingreso, ya que debido a una cultura basada en el machismo a las mujeres en gran porcentaje se les prohibe trabajar, los motivos pueden ser varios, desde los celos, el sentirse inferiores a la esposa , a que ella genere un mayor ingreso económico, el machismo entre otras, desde el momento en que nacen se les educa con la mentalidad de que sólo sirven para casarse y atender al marido, darle hijos y es un cuento de nunca acabar, lo que se supone que debe de ser una vida de placer, de poder compartir con el ser amado, se llega a convertir en una rutina, lo que también viene desencadenando un alto porcentaje en índice de divorcios.
Compartir los roles es parte del proceso, de hecho hoy encontramos que los padres comparten más con sus hijos/jas, así como los quehaceres en el hogar que eran exclusivos de el género femenino.
