El actual Gobierno del Estado de Chihuahua, que encabeza el Lic. César Horacio Duarte Jáquez, realiza importantes e innovadoras iniciativas tendientes a mejorar y modernizar el sistema educativo. Todo ello ha sido posible gracias a la visión y el denuedo que el gobernador ha puesto para colocar a Chihuahua a la vanguardia nacional en materia de cobertura escolar, eficiencia y calidad de la enseñanza. Tales logros son sin duda también compartidos por uno de los cercanos colaboradores que acompañan al mandatario chihuahuense en su compromiso político constitucional, el licenciado Jorge Quintana Silveyra, ex Rector de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, y actual Secretario de Educación Cultura y Deporte, quien desde esa secretaría ha sido el operador del diseño y la ejecución de las acciones y programas que están haciendo de la educación una de las fortalezas de la administración 2010-2016.
Entre los méritos más notables, mismo que por su impacto social ha tenido repercusión nacional y réplica en otras entidades federativas, figura el concerniente a la cobertura total para los estudiantes que aspiran a ingresar a los niveles medio superior y superior, lo que ha confirmado en los hechos la voluntad política que anima al gobernador Duarte a brindar la oportunidad para que todos los jóvenes con deseos de estudiar tengan acceso a un espacio en las aulas públicas. Como soporte para tan ambicioso proyecto, durante el primer tercio del ejercicio gubernamental han sido construidos 11 nuevos planteles del Colegio de Bachilleres, y 9 unidades de la Universidad Tecnológica de Chihuahua.
Otra de las grandes directrices que ha cobrado relevancia en la política educativa de la administración pública estatal en turno, ha sido la orientada a la regionalización de la oferta educacional, tanto desde el punto de vista geográfico, como en lo relativo al contenido de los programas académicos, con el doble objeto de acercar la infraestructura y los servicios de enseñanza a las diferentes zonas del estado, y adecuar los planes de estudio al perfil de las actividades productivas que en virtud de la vocación natural de las regiones ahí se desarrollan, a fin de evitar que los jóvenes emigren de sus comunidades en busca de preparación técnica y/o profesional, promoviendo así su arraigo y permanencia en sus lugares de origen, mediante la expectativa real de incorporarse a la población económicamente activa de los mismos, al alcanzar el grado de técnicos o profesionistas.
Los indiscutibles logros de César Duarte y su equipo de colaboradores han colocado a Chihuahua como una entidad emblemática en materia educativa. Por ello, a nivel nacional, entre los titulares de los poderes ejecutivos de las entidades federativas, así como en el seno de las cámaras de diputados y senadores, cuando se comenta el nuevo paradigma educativo implementado por el gobernador chihuahuense, la clase política se refiere al “Modelo Chihuahua”. Ahora tal modelo se conoce y se imita en otros estados del país. El avance educativo que hoy le es reconocido a Duarte en la nación entera por propios y extraños, de todos los partidos políticos, podría significarle al titular del poder ejecutivo chihuahuense la inmejorable oportunidad de obtener mayores partidas presupuestales de origen federal, para consolidar la política educativa de Chihuahua durante los cuatro años que aún faltan por transcurrir para que concluya su sexenio, pues además de ser amigo cercano de Enrique Peña Nieto, presidente electo de México, el gobernador está presentando resultados tangibles en una gestión educativa que no solo ha sido avalada por la opinión pública general, sino también por las fuerzas políticas y los actores que integran el Congreso de la Unión, quienes como cuerpo colegiado definen la composición de los presupuestos anuales para la operación del Poder Ejecutivo Federal, lo cual incide significativamente en los gobiernos locales.
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