El presente año marcará sin duda para Chihuahua un momento determinante en la historia de su desarrollo socioeconómico, habida cuenta de las importantes acciones que el Gobernador del Estado, licenciado César Horacio Duarte Jáquez, contempla para impulsar el bienestar y el crecimiento de la entidad. Si bien es cierto que el Plan Estatal de Desarrollo 2010-2016, implementado por el gobernador Duarte como eje de las acciones de su mandato constitucional, es la guía toral para el desempeño de la actual administración, un dato adicional que permite albergar esperanzadoras expectativas para Chihuahua lo constituye su supremacía nacional, derivada de la honrosa e indiscutible relevancia alcanzada durante los últimos años, al consolidarse como una de las economías estatales más pujantes, cuyo crecimiento económico y aportación al PIB nacional figura entre los mayores del país.
Es incuestionable la trascendencia de los evidentes avances económicos obtenidos por la administración del gobernador Duarte. Muestra de ello son las inversiones extranjeras, que con exitosos resultados el mandatario se ha empeñado en promover tanto en Asia como en Estados Unidos y Europa, logrando que Chihuahua capte no solo la atención, sino también los millonarios proyectos de prominentes empresas manufactureras, metalúrgicas y de transporte, cuyo asentamiento en la entidad ha significado y continuará significando una considerable derrama económica, traducida en generación de empleos, incremento del consumo y detonación general de la actividad económica.
Asimismo, son positivos los pronósticos que el presupuesto público estatal plantea para el año 2014, al contar dicho instrumento financiero con mayor aportación de recursos federales derivados de la reforma hacendaria, lo cual permitirá al estado mantener su liderazgo económico nacional, en virtud de la realización de las obras de infraestructura hospitalaria, educativa, deportiva, hidráulica, aeroportuaria, y carretera, pendientes de ejecutar, fortaleciendo así sensiblemente los niveles de competitividad y desarrollo de la entidad, permitiéndole conservar la privilegiada posición que ostenta tanto debido a su inmejorable ubicación geográfica como a la infraestructura y los servicios con que cuenta.
Además de las acciones propias del gobierno local, el estado se verá beneficiado con el efecto de las obras que el gobierno federal emprende, pues el gasoducto en construcción, que atraviesa una vasta parte de la zona desértica del territorio estatal, será fundamental para la aplicación de multimillonarias inversiones destinadas a la explotación de las grandes reservas de gas natural alojadas en el subsuelo, y habrá de convertirse en una importante ancla para el establecimiento de industria pesada de origen nacional y extranjero. El presente escenario político y económico permite augurar que el 2014 será un año crucial para el despunte de Chihuahua. carlosjaramillovela@yahoo.com.mx
