El Gobernador César Duarte Jáquez presentó ante el Congreso local una iniciativa para adecuar las atribuciones de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología con las de la nueva Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano del Gobierno Federal, (SEDATU), que es la instancia encargada de aplicar una política integral encaminada a establecer un ordenamiento debidamente planificado del territorio nacional.
Lo anterior, permitirá al Estado de Chihuahua unificar criterios con la federación y con ello poder potencializar las acciones en beneficio de los chihuahuenses, principalmente en lo relacionado con el óptimo crecimiento de sus ciudades.
Es por ello, que el Gobernador está solicitando al Poder Legislativo local reformar el artículo 31 de la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo del Estado, para cambiar las atribuciones de esa dependencia estatal en lo que se refiere a desarrollo y ordenamiento territorial, en equilibrio ecológico y protección al ambiente, en materia de catastro y las demás de que le atribuyan expresamente otras leyes y sus reglamentos.
En la iniciativa enviada, el mandatario estatal destaca la importancia que actualmente cobra la colaboración y coordinación estrecha entre los diferentes entes públicos responsables de la planeación urbana y metropolitana en las entidades federativas y municipios, para crear ciudades más armónicas.
Asimismo, recordó que dentro de la reestructuración de las diferentes dependencias que componen el Gobierno Federal, destacó la desaparición de la Secretaría de la Reforma Agraria para dar paso a la SEDATU, cuya función principal es garantizar mejores ámbitos para el crecimiento del país y el bienestar general de la población en el óptimo aprovechamiento del territorio nacional y su debido ordenamiento en términos de propiedad y expansión de los diversos asentamientos colectivo.
Las principales tareas de esta secretaría federal es impulsar, en coordinación con autoridades estatales y municipales, la planeación y el ordenamiento del territorio nacional para su máximo aprovechamiento, con la formulación de políticas que armonicen el crecimiento o seguimiento de asentamientos humanos; la regulación de la propiedad agraria y sus diversas figuras que la ley respectiva reconoce en los ejidos, las tierras ejidales, las comunidades, la pequeña propiedad agrícola, ganadera y forestal, así como los terrenos baldíos y nacionales; el desarrollo urbano con criterios uniformes respecto a la planeación, control y crecimiento con calidad de las ciudades y zonas metropolitanas del país y su respectiva infraestructura de comunidades y de servicios, además de la planeación habitacional, el desarrollo de la vivienda y el aprovechamiento de las ventajas productivas de las regiones del país, entre otras.