El mandatario se refirió a uno de los principales problemas de la franja fronteriza al señalar que Chihuahua comparte 900 kilómetros de frontera con los Estados Unidos, lo cual tiene ventajas pero también genera problemas.
Añadió que una de las principales dificultades es la oleada de delitos y un momento muy difícil para la seguridad de los chihuahuenses.
Dijo que por lo anterior, es preciso: “Una de las estrategias mayores debe ser fortalecer los vínculos con los gobernadores de los Estados Unidos y con ello también desde cada frontera, fortalecer las capacidades de los gobiernos federales para combatir ese fenómeno que desgraciadamente ha acrecentado la violencia en la frontera”, acotó.
