Los Hamsters es una película sencilla y bien contada. Cuadro por cuadro muestra la desunión y la falta de comunicación de una familia “convencional” de Tijuana. La mentira es esencial para el desequilibrio de ese micro núcleo social.
Es la opera prima de largometraje de Gilberto González Penilla. Su tesis del Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC), institución que fue productora de la cinta que este día se estrena en el Festival de Cine de la Riviera Maya.
“No es una cinta de arte”, afirma a La Jornada el egresado del CCC. “Cada director tiene su punto de visto sobre el cine y el público. Hay unos que piensan en éste, pero otros no. Hoy día el público mexicano no se acerca a las películas porque no se identifica con ellas, no siente que son las historias que se suceden aquí, se aburren y se salen de la sala. Ese es un problema que como cineasta hay que atacar”.
A lo que se refiere el incipiente realizador es que se deben contar historias sencillas de forma ídem en las que el público también disfrute, “que se vaya con satisfacción y reflexión. Es lograr una amalgama entre el cine de autor y el cine comercial.
“A un espectador le diría que es una historia con un tema presente en muchas familias de cualquier parte. Esa es su universalidad”, dice el autor del documental Conversaciones de un matrimonio y el cortometraje Amor en tiempo de incendios, seleccionado en la gira Ambulante.
La película es una comedia negra: Rodolfo y Beatriz son padres de Jessica y Juan. Nadie lo sabe, pero el padre ha perdido su empleo y no lo dice a su familia. Por la edad no consigue trabajo. Beatriz, siempre en la comodidad del hogar, comienza a sentir la comezón de varios años de matrimonio y lo refleja con los coqueteos con su instructor de gimnasio. Jessica inicia un triángulo amoroso entre su novio y su mejor amiga, en tanto que el hermano, Juan, embaraza a su novia y siente que el mundo se voltea de cabeza.
“Hablamos de esa crisis familiar que todos alguna vez hemos experimentado o atestiguado. No quiero generalizar, pero siento que hoy los padres, las parejas y los hijos no se comunican como antes, no pasan tiempo juntos; no se conocen y creo es algo preocupante, no sólo en México, sino en todo el mundo”, afirma Gilberto González Penilla, quien considera que los nuevos directores quieren hacer cine experimentando con todo, pero lo esencial es primero saber contar bien una historia y luego experimentar.
Dice que esto es “por la influencia del cine europeo, que entre menos entiendas es mejor. Es la visión de un autor que no piensa en el público. Lo que hay que hacer es acercar a la audiencia”, reitera
Afirmó que la idea de realizar Los Hamsters nació en 2006, en Tijuana, durante una clase de guionismo del CCC. “Nació con el Big Brother. Se me vino a la mente una familia que conocí en Tijuana, en la que cada miembro se la pasaba en su cuarto viendo el mismo programa; quise contar su vida de incomunicación. La metáfora son los hamsters, animales solitarios y celosos de su espacio, como los individuos de esta familia”, concluye.
El guion fue coescrito con Carlos Rodríguez, la fotografía es de Juan Pablo Ramírez. El reparto incluye a Ángel Norzagaray, Gisela Madrigal, Monserrat Minor y Hoze Meléndez.