Actualmente se conocen más de 20 microorganismos transmisibles por contacto sexual, pero se puede afirmar que las infecciones más comunes son: sífilis, gonorrea, chancro blando o chancroide, clamidia, herpes genital, infección por VIH, virus de Papiloma Humano, así como hepatitis B.
En el estado de Chihuahua hasta el mes de marzo del presente año se tienen registrados 47 personas viviendo con Sida, así como un total de 67 casos ceropositivos (personas portadoras del virus sin desarrollarlo).
Los principales factores de riesgo para adquirir alguna de estas enfermedades es mantener relaciones coitales sin protección, tener prácticas sexuales de riesgo como anal, vaginal, oral sin condón, así como el uso de alcohol y drogas que promuevan conductas sexuales de alto riesgo.
Algunas infecciones como el VIH y la hepatitis B se pueden adquirir con material punzocortante mediante tatuajes y perforaciones que no son precisamente por contacto sexual.
La Secretaría de Salud recomienda que cuando se detecte en alguna persona infecciones, se debe mantener una abstinencia sexual (no tener relaciones sexuales) hasta comprobar la curación total de la afectación, tanto en hombres y mujeres, pues de lo contrario se facilita su diseminación (se trasmite a otras personas).
Lamentablemente las infecciones de transmisión sexual pueden dejar secuelas de daños, en las mujeres causar la infertilidad (incapacidad de poder tener un embarazo) y otras complicaciones en la capacidad reproductiva de la persona como son: enfermedad inflamatoria pélvica, dolor pélvico crónico (dolor abdominal bajo), carcinoma cervicouterino, el cual puede ser consecuencia de la infección por algunos tipos de virus de papiloma humano.
En los hombres las afectaciones después de una infección sexual puede ser la epididimitis (inflamación del epididímo que se encuentra dentro de los testículos), estrechez uretral (significa que el conducto por donde sale la orina se hace estrecho), orquitis (inflamación de los testículos) o esterilidad (que ya no puede fecundar a un óvulo y no puede embarazar a su pareja).
Durante el embarazo algunas infecciones transmitidas sexualmente como la sífilis, el VIH, la gonorrea y la clamidia, pueden pasar de la madre a su hijo mediante la gestación, al momento del nacimiento o la lactancia; y ocasionar complicaciones al producto como infecciones perinatales.