Destacó que en Moris se reventó un presón pequeño que inundó un pozo, y algo similar sucedió en Pueblito de Allende y en el caso de las comunidades de la región serrana, que dependen de manantiales y otras pequeñas fuentes de abastecimiento como galerías filtrantes, se han visto beneficiadas con las condiciones climatológicas que prevalecen; asimismo, dijo, en el fraccionamiento La Galera, ubicado al sur de la ciudad de Chihuahua, los daños ocasionados son menores.
Indicó que en el caso de la sequía, esta lluvia es apenas un paliativo, ya que regularmente en Chihuahua se registran precipitaciones pluviales entre 430 y 480 milímetros al año, y en estos cinco días llovieron entre 200 y 300 milímetros, y mucha de esta agua se va hacia los ríos y las presas, por lo que la recuperación de los mantos freáticos es más lenta.
Ante el daño ocasionado por la sequía en los acuíferos, la captación de lluvias de estos cinco días es apenas un aliciente para continuar aportando agua a la planta potabilizadora de la Ciudad de Chihuahua, pero estas lluvias no constituyen una recuperación de la sequía, por lo que los proyectos de la dependencia continúan en marcha evaluando cada población y cada región. Indicó que en Chihuahua existen más de mil 800 poblaciones menores de 2 mil 500 habitantes, en las que resulta onerosa la construcción de un pozo o una obra grande infraestructura, y se abastecen estas poblaciones mediante una galería filtrante.
En relación con los Fondos de Desastres Naturales, señaló que las evaluaciones son puntuales y al entrar en el FONDEN hubo muchas poblaciones que no entraron en este esquema y sucede lo mismo en caso de las inundaciones.
Indicó que el Servicio Meteorológico Nacional de la Comisión Nacional del Agua había efectuado previamente una observación en el incremento de la temperatura en las costas de Chiapas, sobre 32 grados Centígrados, lo que provocó una gran evaporación y al chocar con una baja presión proveniente del norte, vino a dar este fenómeno, este beneficio.
Finalmente expresó que se mantienen atentos, en coordinación con la COESPRIS, en materia de cloración del agua, y a fin de detectar cualquier problema de agua turbia que pudiera presentarse, lo cual es natural prácticamente, sin embargo es necesario que se de a conocer a las autoridades, por lo que estarán atentos a cualquier llamado.
Al hacer referencia a las presas, informó que el día 21 sobrevoló con el Gobernador del Estado algunas presas, y en el caso de la Presa La Coyota, de Belisario Domínguez, se encuentra llena y en el caso de la de Maguarichi, faltan 2 metros para concluir las obras de la cortina y se encuentra al 60% de su captación, siendo necesario el desagüe para poder concluir la obra. Sin embargo, enfatizó que básicamente deben encontrarse recuperadas básicamente todas las presas.
“Chihuahua nunca se ha negado a pagar los tratados que tenemos con ellos, pero si el estado no tiene agua, pues nadie puede pagar lo que no tiene”, señaló a pregunta expresa, y destacó que en materia del Tratado Internacional de Agua con los Estados Unidos, no se toma en cuenta el excedente de agua, sino que se mide únicamente cuando se requiere, pero con la captación actual de la Presa El Granero, puede considerarse como una garantía de pago.
Indicó que la Presa La Boquilla está captando el uno por ciento, y aún le falta muchísimo; la Presa Las Vírgenes, dijo, está desaguando por determinación tomada por la Comisión Nacional del Agua y para no llegar a algún tipo de emergencia. Destacó que sería una locura abrir las compuertas de la presa El Rejón debido a las inundaciones en el área del parque, ya que se espera aún la llegada de más lluvia. Enfatizó que la zona es desértica y se requiere de infraestructura, pero al registrarse una inundación en un parque como El Rejón, tarde o temprano el agua retomará su nivel y el agua que capta esta presa es enviada a la planta potabilizadora para el consumo de la población.