El Comité estatal del Movimiento Antorchista, encabezado por su líder estatal Antonio Escamilla Meza, y el secretario de Desarrollo Social de gobierno del estado, en representación del gobernador, presidieron la inauguración.
En la parte artística, brilló el talento del grupo de danza del CBTA No. 2 de Ciudad Delicias, cuyos integrantes derrocharon energía y coordinación cuando ejecutaron cuadros bailables de Tamaulipas, una serie de tradicionales polkas de esa región del país. Se trata del Ballet de Danza Folklórica Cuauhtli, cuyo director, el profesor Magdaleno (Maleno) Carrasco Soto, lleva 5 años consecutivos en el primer lugar de los concursos inter-Cbtas en el estado.
“Para bailar tango se necesitan dos, hace falta que la gente este organizada y esta es una prueba de que es vital organizarse, para desarrollar este tipo de espacios, decía yo que para bailar tango se necesitan dos y fue necesaria la voluntad política de nuestros gobernantes y como en Antorcha nos han enseñado a nosotros a ser agradecidos le damos las gracias al gobierno por esta obra, pero como la pobreza no conoce límites, y las necesidades siguen cambiando, y la colonia Granjas Cerro Grande, una de las más grandes de la ciudad, La Soledad que es en un 50 por ciento indígena, La Noria, Los Llanos, están esperando el mismo espíritu de solidaridad por parte del gobierno para la construcción de los salones de usos múltiples. Y nueve mil familias antorchistas esperan la implementación de programa alimentario que aún no ha llegado” dijo en su discurso el líder estatal del Movimiento Antorchista en Chihuahua Martín Antonio Escamilla Meza
La cancha se inició con una gestión en la anterior administración presidida por José Reyes Baeza, con una inversión de 500 mil pesos, gracias a la lucha de Antorcha, y a raíz de una serie de gestiones, algunas de ellas francamente movilizaciones de protesta, y dos marchas, porque las obras se atoran, y la gente responde con gran atención. “Se lograron primero la cancha y el salón de usos múltiples, y después, en noviembre de 2010, enarbolamos algunas demandas de servicios públicos, junto con una solicitud de ampliación de la plancha de la cancha de basquetbol, y la creación del domo”, abundó Iván Leo Tepatzi Ramírez, dirigente de los colonos en esta zona del Cerro Grande.
La segunda parte de la obra, con el domo y la ampliación de la cancha, costó un millón de pesos y, “en conjunto, es un lugar ideal para realizar actividades comunitarias en la colonia, para que se puedan impartir clases de danza, y poder organizar una serie de talleres deportivos y culturales”, abundó el dirigente.