Asimismo, Luis Hernández Navarro, coordinador de Opinión de La Jornada, recibió mención honorífica por su libro Siembra de concreto, cosecha de ira.
Este premio, convocado por el gobierno de Venezuela, es el más importante en su tipo; está dotado con 150 mil dólares, y la publicación de 5 mil ejemplares de la obra, que se reparten de manera gratuita. De acuerdo con la convocatoria también se entregará una escultura, en una ceremonia a la que asistirá el presidente Hugo Chávez y que está prevista para septiembre próximo.
En esta ocasión el jurado estuvo integrado por Ignacio Ramonet (España), Fernando Martínez Heredia (Cuba), Germán Yépez (Venezuela) y Mónica Bruckman (Brasil), quienes consideraron que la obra del mexicano es una contribución original y rigurosa al análisis del capitalismo contemporáneo y su forma de acumulación.
Consumismo y alienación
En declaraciones recogidas por la prensa venezolana, Ignacio Ramonet subrayó que el libro Del rencuentro de Marx con América Latina en la época de la degradación civilizatoria mundial estudia la forma no sólo en la que el consumismo crea una alienación, sino qué tipo de alienación, y “con casos concretos explica el funcionamiento general, ideológico y cultural del neoliberalismo en la práctica, nos alerta del fenómeno dominante hoy día y nos da herramientas y conceptos que nos permiten resistir”.
En esta edición se presentaron 48 obras de 14 países, y cinco libros, incluido en de Hernández Navarro, recibieron mención honorífica: Siembra para la industrialización socialista, de Víctor Álvarez Rodríguez; Bajo el imperio del capital, de Claudio Katz; De Cristóbal Colón a Hugo Chávez, de Gerónimo Pérez Rescaniere, y Los inicios de la tradición Iberoamericana de los derechos humanos, de Alejandro Rosillo Martínez. En años anteriores también se ha premiado a Enrique Dussel y Bolívar Echeverría (1941-2010).
En entrevista con La Jornada, Jorge Veraza señaló que si bien hay quienes afirman que el pensamiento de Marx y su obra ya están desfasados y superados, sin embargo, en cada crisis económica se demuestra que son chismes.
Veraza, catedrático de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), señala que si esa afirmación se hubiera hecho en 2006 “la habríamos creído. Sin embargo, en 2007 llegó una crisis de la chingada, una crisis mundial que está descrita en El capital, en el tomo 3, sección tercera. Una crisis que sigue siendo por culpa de unos banqueros marrulleros que se inscriben en un proceso mucho más amplio. Para que ocurra una crisis no basta echarle la culpa a ellos: los gobiernos –siguiendo la misma ley de la tendencia de la ganancia a perder– utilizan recursos públicos para salvar a los banqueros. Así que, ¡cómo no va a tener actualidad Marx!
“Cada crisis económica nos demuestra la vigencia de Marx y lo primero que debemos tomar en cuenta para hablar de su actualidad es la evidencia empírica, pero eso no es lo único que nos da la vigencia de un pensador, sino también la coherencia que se sostiene con argumentos lógicos y explica la realidad. Esa es una de las grandes cualidades de Marx.
“Por eso cuando los ideólogos de derecha han querido desvirtuarlo sólo hacen chisme, porque casi nunca se le han enfrentado con argumentos sólidos: es un pensamiento coherente que tiene cientos de años.”
Seminario en Bolivia
Del rencuentro de Marx con América Latina nació después del seminario Pensando el mundo desde Bolivia, organizado por el gobierno de ese país y que tuvo por tema Socialismo y democracia frente a la degeneración civilizatoria del capitalismo mundial. Veraza acudió invitado, junto con Andrés Barreda, quien llevó una antología con obra de Bolívar Echeverría, fallecido en 2010.
La vicepresidencia boliviana tuvo la idea de pedir materiales escritos “por nosotros y envié este libro, que es entre ensayo y síntesis de mi obra. Todo se encuentra publicado, pero no de manera reunida”, dice Veraza.
Se divide en cuatro grandes apartados: La historia del capitalismo hasta hoy como si lo viera Marx, La subsunción real del consumo bajo el capital o Capitalismo contemporáneo; El Capital, el mercado mundial y la nación, y Hegel y Freud en la historia del capitalismo y la reconstrucción del marxismo en el siglo XXI.
Fuenteovejuna ambiental
Luis Hernández Navarro manifiesta que Siembra de concreto, cosecha de ira “es una historia de los movimientos socioambientales que han enfrentado la devastación del medio ambiente; simultáneamente es una pequeña radiografía de la destrucción del medio ambiente, el agua, los bosques, el aire, como resultado del doble proceso de capitalismo salvaje que se ha implementado en nuestro país y de una moratoria ambiental de facto que los distintos gobiernos han dado sobre todo a las empresas extranjeras para que inviertan en México y puedan de esta manera enfrentar la desventaja comparativa que implica el bajo costo de la mano de obra en China”.
Habla de cómo en nuestro país “promover la justicia ambiental es una actividad arriesgada, de tal manera que muchos dirigentes que han defendido su medio ambiente y sus recursos han sido asesinados o apresados por esta causa, por ejemplo Aldo Zamora, Verónica Hernández o Santiago Pérez, y también cómo la lucha ambiental en nuestro país no es un lujo que se puedan dar las gentes con mayores recursos.
“Por el contrario, es una lucha que ha sido protagonizada en muchos sentidos por los más pobres, por los que ponen en práctica lo que Joan Martínez Alier ha llamado el ecologismo de los pobres.
“Estas luchas ambientales de las que da cuenta el libro configuran lo que puede ser una especie de Fuenteovejuna ambiental, donde ciudadanos rabiosos toman la justicia en sus propias manos para defender el medio ambiente en lugares como Hidalgo, Oaxaca, Zacatecas o Guerrero y ahora de manera muy destacada en Wirikuta.”
La Jornada